miércoles, 11 de abril de 2018

ADIÓS A UN GRAN BATEADOR DE ORO BERCIANO: un sentido y pequeño homenaje a Andrés Piñuelo "Sito".

SITO: "que estos áureos momentos queden para siempre atrapados en la batea del tiempo" 

Hoy por la mañana me comunican el fallecimiento de Andrés Piñuelo, para nosotros "Sito", tras una cruel enfermedad. Se va sin hacer ruido una gran persona: sencillo, discreto y muy servicial. Pero también se despide un gran conocedor del oro en los ríos bercianos, en los que era un experimentado bateador. Con él hemos vivido inovildables experiencias: nos ha enseñado las técnicas y las artes del bateo del oro, pero sobre todo nos lo ha transmitido con enorme cordialidad. Siempre acompañado de su inseparable Ana, con la que ha compartido sus últimos años, hemos pasado muy buenos momentos en excursiones , bateos y comidas camperas.
En 2013 pudo mostranos a todos las pepitas de oro bateadas en el Sil, en el programa de TV Española el programa "A ras de cielo":

 Aquí podemos verle con su inseparable sombrero tejano en compañía de su hijo

Y aquí en compañía de Paco, con el que compartió numerosos bateos.


Entre sus muchas actuaciones con el grupo de bateadores destaca este bateo en el Aula Arqueológica de Las Médulas en 2014, donde muchos estudiantes aprendieron el arte del bateo de su mano:


A lo largo de estos días iré añadiendo nuevas fotos en su recuerdo, para nosotros imborrable.


Unas cuantas fotos más:


La meditación de un bateador.

Preparándose para posar ante los medios!

jueves, 5 de abril de 2018

ORTOCERÁTIDOS: los depredadores de los mares silúricos...

En anteriores ocasiones hemos abordado el tema de los ortocerátidos en este blog. En aquella ocasión nos referiamos a la aparición de estos antiguos cefalópodos en el Silúrico de los Ancares. A lo largo de su larga cuenca hidrográfica, el río Sil cruza y corta en varias ocasiones terrenos que se formaron hace nada menos que unos 425 millones de años en el periodo Silúrico. En El Bierzo hay diversas zonas que pertenecen a este periodo, todas ellas de origen marino. Se trata de mares profundos, cálidos en algunas zonas del planeta, pero más fríos en la zona perigondwánica, donde nos situamos.
Estos mares más bien oscuros son el hábitat de estos cefalópodos. He aquí una reconstrucción disponible en la web:

Los ortocerátidos son de los cefalópodos más antiguos y sus ortoconos o fragmoconos se conocen desde el periodo Cámbrico Superior, siendo típicos de los mares tropicales de este periodo. Son típicas las calizas de ortocerátidos que se pulen como elementos decorativos y que se comercializan en Marruecos, como estos de mi colección que muestro.

El fragmocono está dividido en un serie de cámaras, que son las responsables de la flotabilidad y maniobrabilidad de la concha. El animal podía subir y bajar a diferentes profundidades impulsado por el sifón o moverse lateralmente, al parecer con movimientos lentos. 


Indudablemente y como ocurre con las sepias y los calamares actuales, eran carnívoros. Su concha les protegía de los primeros peces, que al desarrollarse como grupo pasaron a ser sus principales depredadores. Estas conchas rectas, con divisiones muy simétricas representando las cámaras, es lo que se ha conservado hasta nuestros días, pudiendo encontrarlos así:

Pero si algo llama la atención es que, cuando el animal muere y se deposita en los fondos marinos, se producen fenómenos tafomómicos especiales que hacen que se altere el entorno del fósil, provocando su aparición en el interior de nódulos, algunos de los cuales pueden contener varios ejemplares en distintos grados de conservación.
Aquí pueden verse los nódulos en cuyo interior pueden encontrarse varios ejemplares:
 Otras veces hay un gran fragmocono bien conservado:
Y otras está peor conservado, quedando un molde del lugar que ocupaba en el nódulo:
Muchas veces hay más de uno en diferentes posiciones y grados de conservación:
Estos animales, como ocurre con las actuales sepias y calamares, eran bastante sofisticados: el sistema sifonal de impulsión, las cámaras reguladoras de flotabilidad y su complejo sistema nervioso, les permitió dominar los mares paleozoicos. Sus fragmoconos son los únicos y raros testimonios de su antiguo esplendor.

domingo, 11 de marzo de 2018

MUJERES PALEONTOLOGAS: grandes mujeres y grandes aportaciones a la ciencia.

En mis inicios en la Paleontología, allá por los 13 años, no podré olvidar que fue precisamente una mujer y geóloga (Carmen, geóloga de Bilbao) quien me enseñó y después regaló, mi primer fósil. Ella fue quien por primera vez me enseñó su colección de fósiles y quien me explicó cómo se formaban y su importancia en la evolución. Este pequeño fragmento de coral cretácico, que conservo con aprecio, fue para mí  un tesoro.
A lo largo de todos estos años he conocido unas cuantas mujeres interesadas por la geología y algunas también por los fósiles. Su visión siempre ha sido abierta, positiva y aportando grandes ideas.
Históricamente en la Paleontología ha habido algunas mujeres (hoy conocidas) pero seguramente unas cuantas más desconocidas, con curiosidad por esta ciencia ya la que han hecho grandes aportaciones. Sin embargo, como ocurre en otros ámbitos, sus éxitos y sus espléndidos descubrimientos han sido borrados de la historia o relegados a una categoría inferior.
La más emblemática de estas mujeres nació en la Inglaterra victoriana y se llama Mary Anning (1799)

Esta mujer, martillo en mano, es la representación de todo un carácter: Nacida en Lyme Régis (costa de Dorset, Sur-Oeste de Inglaterra) y sin formación geológica, fue la que, recorriendo las costas rocosas jurásicas, descubríó el esqueleto de un ictiosaurio, al que describió, dibujó e interpretó. Posteriormente descubrió también otros de plesiosaurio. Además recogió muchas muestras de invertebrados fósiles del jurásico, como belemnites y al parecer fue la primera en describir  y saber interpretar los coprolitos. Pero su vida no fue fácil: su clase social baja y su condición de mujer hicieron que nunca fuera del todo admitida por la comunidad científica, a pesar de que algunos de los hombres de su época explotaran sus aportaciones  científicas en su propio beneficio. Ni siquiera fue citada por los paleontólogos de su época.El acceso a la condición de geóloga era impensable para una mujer en aquella Inglaterra  victoriana.
Por suerte el Lyme Régis Museum, construido en su propia casa y que conserva sus hallazgos, es un monumento permanente a su memoria. 




Aquí podemos ver el cráneo del ictiosaurio que descubrió y la reconstrucción de su esqueleto.: ojo! los dibujos son suyos! Un talento más.



Pero no sólo ella, sino muchas más mujeres se han interesado y han hecho grandes aportaciones a la Paleontología: he aquí una lista (no exhaustiva) de algunas de ellas:
ETHELDRED BENNET (1776-1845): aportaciones en estratigrafía, espongiarios y moluscos.
MARY ANN MANTELL: descubridora del diente de Iguanodon que hizo conocido (y del que vivió) su marido cirujano Guideon Mantell.
CHARLOTTE MURCHISON: es la mujer de Sir Roderick Murchison, geólogo británico conocido por la zonación de graptolitos, muchos de los cuales encontró Charlotte.
CAROLINE BIRLEY and DOROTEA BATE:autodidactas célibes, que reunieron importantes colecciones de fósiles sobre las que se hicieron importantes estudios y  descubrimientos posteriores.
PAULINE CRIÉ(1874) : aportaciones en cartografía y paleontología en compañia de su marido. A pesar de su trabajo y de  su muerte precoz, su marido no le cita en sus publicaciones.
EMMA RITCHER : ella y su marido trabajan y publican juntos en el estudio de los trilobites, sin embargo sólo se le cita a él.
MARIE STOPES, ELEONOR REID: importantes aportaciones a la paleobotánica.
LUCY CRANWELL (Nueva Zelanda), IRENE CRESPI, DOTOTHY HILL y YOLANDE LE CALVEZ: aportaciones a la micropaleontología.
FLORENCE BLASCOM, ALICE WILSON, HILDEGARDE HOWARD, VI NIFRED GOLGRIND. paleontólgas norteamericanas. A modo de ejemplo, Winifer Goldgring es la neoyorquina que llegó a a ser en 1949 la primera presidenta de la Paleontology Society y realizó importantes aportaciones sobre crinoideos devónicos.
MARÍA PAULOVA (Rusia) nacida en  en 1854, realizó la comparación entre los mamíferos fósiles de Rusia y los americanos. Es de las pocas que consiguió ser reconocida y ejerció de profesora de Paleontología en diferentes paises.
¿Y en España qué?
Aquí también hay unas cuantas mujeres que ejercieron y ejercen. He aquí algunas de ellas:
ASUNCIÓN LINARES RODRIGUEZ (1921–2005) en 1961 obtuvo la cátedra de Paleontología en Granada.en 1952 . Bajo la dirección de Bermudo Meléndez Meléndez (1912–1999) presentó su tesis doctoral titulada“Revisión de los trilobites de España”.
NIEVES LÓPEZ MARTÍNEZ (Burgos,  1949 -2010) fue una paleontóloga española especializada en investigaciones sobre el registro fósil de vertebrados y una de las responsables de la modernización de los estudios paleontológicos en España. Además de ser reconocida mundialmente como una eminencia en el estudio de la evolución de los lagomorfos del Cenozoico.Es autora del libro "Guía de campo de los Fósiles de España" (Ed Pirámide), un fantástico libro pionero para todos y todas las amantes de la Paleontología en España, que es además uno de mis primeros libros de Paleo junto al de Bermudo Meléndez.
En España podemos decir que hay grandes paleontólogas, que además están ocupando puestos de reponsabilidad. Citaré dos a modo de ejemplo: Isabel Rábano, que dirige el Museo del Instituto Geológico y Minero (especialista en trilobites) y Carmen Álvarez que dirige el Museo Paleobotánico de Córdoba (especialista en paleobotánica). Seguro que hay más en todos los campos de la Paleo y cuya labor desconozco.

Estas son sólo algunas de las mujeres que han realizado aportaciones a ciencia en este campo de la Paleontología, pero seguro que hay muchas otras que permanecen en el más absoluto anonimato.
La aportaciones a la ciencia no deberían tener sexo. Si en el pasado las mujeres científicas han sido discriminadas y condenadas al olvido, deberían reflexionar las Sociedades Científicas de todo el mundo y reescribir sus libros de Historia, reconociendo y dando su sitio a estos importantes logros sin los cuales no hubiéramos llegado al nivel actual.
Como colofón a este pequeño reportaje, os recomiendo la lectura del libro  "The fossil Hunter" , escrito por Shelley Emling, escritora británica que tiene a su hijo Ben (al que le encanta buscar fósiles) y ha escrito este libro, que es  un recorrido por la vida de Mary Anning y por sus increíbles logros.





domingo, 4 de marzo de 2018

EL COTO WAGNER: Una impresionante mina de hierro en el territorio berciano.

En esta ocasión vamos a adentrarnos en la más importante explotación de hierro del Bierzo: el Coto Wagner. Esta mina de hierro que abasteció a la industria siderúrgica vasca durante muchos años, ahora se encuentra abandonada. Es extensa por fuera y con una red de grandes túneles por los que entraban los camiones y las máquinas para la extracción del mineral. En algunos puntos estos túneles se han hundido dejando unos enormes agujeros circulares....

En el frente de explotación pueden verse las capas de oligisto y siderita que le han hecho tan conocido.
Para más información sobre esta fascinante ruta, visita nuestra página: "Rutas de 9 a 1", donde podrás comprender todas las infraestructuras mineras de esta gran mina y los importantes recursos que aún guarda.

jueves, 8 de febrero de 2018

PROF. ROBERTO WAGNER: "in memoriam".

El Prof. Roberto Wagner falleció ayer a los 90 años de edad en su querida Córdoba. Ante todo expresar nuestro sentimiento de pesar por la pérdida humana, de la persona entrañable, siempre dispuesta a escuchar y a dar ánimos. Era todo un carácter.
Tras este perfil humano tan cercano se escondía un grandísimo paleontólogo cuyo mundo Carbonífero exploró y al que dedicó toda una vida: se puede decir que la Paleobotánica era su vida.
Nacido en Indonesia , de origen holandés, quedó fascinado por nuestro país y es principalmente aquí donde desarrolló su carrera. Ha descrito y bautizado un gran número de especies paleobotánicas y ha realizado las más completas revisiones del Carbonífero que se han escrito en nuestro país. Consecuencia de sus innumerables expediciones por España, pero también por todo el mundo, ha reunido una impresionate colección de fósiles vegetales de todo el mundo, que se exponen en el Museo Paleobotánico de Córdoba, que él creó y dirijió.
Ha estado en numerosas expediciones en El Bierzo, describiendo géneros y visitando yacimientos. He tenido el placer de conocerle y tratarle. De él siempre me impresionó su aspecto de viejo profesor  con una mente joven e incansable, siempre abierto a todo lo que tuviera que ver con su mundo. Exigente y a la vez amable, iconoclasta y clásico a partes iguales: una persona que transmite y engancha.
Por suerte la comunidad científica le ha demostrado su agradecimiento por su inmensa labor en numerosas ocasiones. Su  gigantesco legado formará parte de la historia de la Paleobotánica.
Vaya esta foto en recuerdo  de una de las ocasiones en que tuve el placer de hablar con él en su despacho del Museo Paleobotánico de Córdoba.



martes, 6 de febrero de 2018

LOS CASTROS PRERROMANOS EN EL BIERZO: en busca del oro en los confines del imperio romano.

El oro, mineral patrón de la moneda y del comercio, ha sido desde la antiguedad un codiciado metal. En el imperio romano, expertos mineros llegados de todos los territorios imperiales viajaron a al Hispania rumbo al noroeste. Guiados por los textos de los Plinios y protegidos por las legiones, llegaron a estas tierras inhóspitas del Bierzo dispuestos a poner patas arriba cuantas montañas hicieran falta. Para ello se ayudaron de sus potentes obras de ingeniería: extensísima red de canales y estanques, minería de oro en todas sus variantes....el objetivo final, la obtención del preciado metal.
Si queremos viajar en el tiempo y aproximarnos a aquellos intrépidos hombres que dedicaron sus vidas a la extracción del oro en El Bierzo, qué mejor ruta que la de los castros prerromanos del oro, que incluye a los pueblos de Castropodame, Turienzo Castañero, San Pedro Castañero y Matachana.
Aquí se muestran los trípticos que se exponen en estos pueblos, donde se indican las rutas y las explotaciones mineras. A ellos ha contribuido Geobierzo, de manos de Paco Arias, y esperemos que sea un aliciente par que todos aquéllos que visiten El Bierzo se den cuenta que hay oro además de en Las Médulas: en realidad las explotaciones de oro romanas están por todo El Bierzo.
En primer lugar va el tríptico de Castropodame, ejemplo de la minería extractiva romana:


En segundo lugar podemos hacer un recorrido por los pueblos de San Pedro Castañero, Turienzo Castañero y Matachana donde de sitúan  los castros vinculados a la extracción de oro:
Y para finalizar, un recorrido por esta ruta, donde sus mentores nos muestran las explotaciones mineras romanas en compañía de los alcaldes y los numerosos excursionistas de estos pueblos. Para ver este vídeo, visitar este enlace:
RUTA POR LOS PUEBLOS CASTREÑOS DE LA MINERÍA DEL ORO EN EL BIERZO

Por último animar a estos pueblos a que sepan conocer y divulgar adecuadamente este precioso legado.

domingo, 14 de enero de 2018

ALTO DEL MANZANAL: viaje a los mares ordovícicos....

Para empezar el año vamos a hacer un breve pero intenso viaje por los ambientes marinos de un lejano periodo geológico perteneciente a la Era Primaria o Paleozoica, hace nada menos que unos 470 millones de años. Se trata de un periodo, el Ordovícico Medio, muy prolífico en la península ibérica.
Hay grandes yacimientos en el arco que va desde Valongo (Oporto, Portugal) hasta los Montes de Toledo, donde se encuentran los más famosos yacimientos de este periodo, sin olvidar la sierra de Guadalajara.
Aquí, en El Bierzo, hay varios yacimientos se este periodo, Ordovícico medio. El problema de toda esta zona es que ha estado sometida a un intenso metaformismo, que ha deformado los fósiles contenidos en estas pizarras, por lo que los ejemplares que aquí podemos encontrar están aplastados y con la forma alterada. A ello hay que añadir la fuerte piritización, que hace que cuando los fósiles se exponen a la atmósfera, rápidamente se meteorizan en forma de limonitas y oligistos, que se degradan rápidamente y por ello muchas veces sólo aparecen los moldes externos.

Aquí arriba vemos un trilobites arrollado "en bola", donde puede observarse el cefalón por arriba y el pigidio por abajo, perfectamente ensamblados.
En esta de arriba se muestra un rhabdosoma de un graptolito típico de este periodo: Didymograptus.

En esta otra podemos ver un bivalvo con la oxidación típica , que le da esta pátina rojiza.

Aquí podemos ver otro bivalvo, típicos de este periodo geológico.