Ante todo desearos a todos nuestros seguidores un FELIZ 2025, lleno de ilusión por nuevos proyectos, que nunca falten....y que se materialicen.
Como ya os hemos anunciado, este año cada mes habrá un fósil del mes, que será representativo del Paleozoico berciano y de León. Así que comenzaremos con un trilobites de un periodo frecuente y muy representativo del Bierzo, el Silúrico. Lo hemos tratado en numerosas entradas del blog y hemos visto que sobre estos terrenos de origen marino , de unos 423 millones de años, en la serie Prídoli, ya muy cercano al siguiente periodo, el Devónico. Los trilobites ENCRINÚRIDOS se caracterizan por tener un cefalón cubierto de tubérculos en hileras:
Un rico fondo marino compuesto por numerosas especies de invertebrados vivían en el mismo en un ambiente epibentónico. En esta reconstrucción hipotética en una de mis acuarelas, he colocado la posición del trilobites encrinúrido sobre este fondo marino.
Vivían semienterrados en los fondos limosos (después transformados en lutitas grises), mostrando únicamente los ojos pedunculados, que, a modo de periscopios, vigilaban los posibles depredadores. Recordemos que en el silúrico superior los cefalópodos ortocerátidos eran depredadores.
Al parecer las hileras de tubérculos acababan en finos pelos táctiles, capaces de detectar vibraciones en el entorno y poner de aviso al trilobites: eran verdaderos detectores de posibles depredadores. En este periodo geológico son muy frecuentes las mudos de estos trilobites y en zonas de turbulencia las corrientes marinas depositan estos restos llamado exuvios, como este acúmulo que se muestra:
Debido a las frecuentes mudas los restos de tórax y pigidios se encuentran frecuentemente, siendo más raro encontrar ejemplares completos:
Rara vez aparecen los exoesqueletos completos en posición de acecho:
Sólo en contadas ocasiones podemos encontrar el exoesqueleto completo: