Pocos lugares hay como éste para la observación de la geología en uno de los enclaves más didácticos para recorrer sobre el terreno el metamorfismo de contacto: hablamos del borde del batolito de Montearenas que contacta con el pantano de Bárcena. Aprovechando estos meses de octubre y noviembre, que es cuando el pantano suele estar más bajo, podemos descender por sus empinadas márgenes, en forma de gigantescos graderíos..... A la vista aparecen las marcas de descenso de nivel, que esculpen espectaculares bancadas a modo de un amplio estadio, repleto de fragmentos de rocas limpias.....
Puede recorrerse desde el final de la ruta de Bas Van de Goor, cruzando la carretera de la presa del pantano de Bárcena. El sentido de la ruta va desde el propio batolito hasta los extremos más lejanos, allá por el club náutico.
El principio de la ruta está marcado por los granitos, que indican que estamos en propio batolito, en plena emisión magmática. Los tipos de granito pueden verse mejor a lo largo de la ruta de Bas, al otro lado de la presa.
El batolito emerge en el periodo terciario entrando en contacto con las cuarcitas cámbricas, pertenecientes a la serie " Los Cabos" (en colores verdes en el mapa geológico).
Consecuencia de este contacto es que las cuarcitas, en formaciones tabulares, están atravesadas por filones de cuarzo, algunos de considerable grosor. Pueden verse en las proximidades de la presa.
Estos filones de cuarzo lechosos suelen contener minerales acompañantes de muy diversos tipos, como por ejemplo las turmalinas negras (chorlo), que pueden verse en forma de pequeños prismas.
También aparecen en esta zona las cornubianitas cordieríticas, típicas del metamorfismo de contacto
Pueden observarse como anchas franjas negruzcas que al observar con el microscopio Dino-Lite muestran su estructura cristalina. También aparecen las micas moscovita/sericitas, muy brillantes y blancas en multitud de pequeñas láminas cristalinas.
A medida que nos vamos alejando del foco magmático, podemos observar el contacto de las altas temperaturas con las pizarras cambro-ordovícicas y la aparición de las "pizarras mosqueadas", con sus típicos cristales de quiastolita (andalucita). Estas pizarras han sufrido un fuerte metamorfismo de contacto y no presentan restos apreciables de materia orgánica.
Estos cristales de andalucita pueden crecer y desarrollarse más dependiendo de sus condiciones de formación según la distancia al foco magmático.
Los minerales asociados a estos batolitos pueden tener procedencia hidrotermal, al inyectar vapor a presión entre las rocas sedimentarias, lo que origina muchas variedades de silicatos, como estos agregados fibrosos de caolín.
También hay metales asociados a los filones de cuarzo, como es el caso de la goethita
La ruta está marcada por los crestones de pizarra fuertemente transformada por el metamorfismo de contacto, influencia que se hace notar incluso en las zonas alejadas del eje del batolito. estas zonas más distantes pertenecen al periodo Silúrico y se encuentran recristalizadas. No se aprecian restos fósiles, sin embargo se puede comprobar cómo la formación continúa al otro lado del pantano.
En el transcurso de nuestro recorrido desde la presa del pantano de Bárcena en dirección al Club Náutico comenzamos observando granitos en el eje del batolito , después el metamorfismo de contacto con las cuarcitas cámbricas y con las pizarras de Luarca, para finalizar en el saliente rocoso con los esquistos pizarrosos de edad silúrica. Este último es el saliente rocoso más prominente y por tanto resitente a la erosión, que resalta en el paisaje formando un crestón claramente visible.