En las proximidades de Castropodame existe un gran complejo minero romano dedicado a la extracción de oro. En este caso y a diferencia de Las Médulas, el sistema de explotación combinaba la "ruina montium " soltando agua procedente de canales, con la extracción de fragmentos de cuarzo aurífero en galerías. Estos fragmentos eran triturados por medio de morteros de diversas formas: unos eran cuencos tallados en cubos de cuarcita (en una o varias caras) y otros eran molinos de granito procedentes del cercano batolito de Montearenas. Estos últimos eran de mayor tamaño y forma circular, pensados para triturar pequeños fragmentos de cuarzo aurífero por un sistema de fricción rotatoria. Muchos se encuentran diseminados por el pueblo formando parte de casas y vallados:
Este sábado 23 de abril le IEB organizó una excursión para conocer sobre el terreno estas importantes minas, sus galerías , las cárcavas, los talleres de trituración y por supuesto las singulares cuevas que podrían ser habitáculos mineros. En su interior pueden apreciarse las huellas de los picos sobre la blanda pizarra ordovícica, que adquiere franjas rosadas. Se aprecia una repisa al final de cada camareta y en las paredes laterales unos huecos que podrían servir para iluminar la cueva mediante lucernas.